si tu enemigo te supera en número, arrójales ganado

Cuántas veces habrás oído que los españoles han sido siempre muy pícaros (y lo siguen siendo). Un gran ejemplo de picaresca, nos cuenta Eduardo Ruiz de Burgos en su libro “La difícil herencia”, lo encontramos en la curiosa defensa del puerto de Spanish Town de Jamaica.

Allá por el año 1600, unos 200 hombres de Colón tuvieron que vérselas con 16 navíos y 1.500 hombres del ejército británico en lo que parecía ser una contienda ya perdida desde el primer momento.

Es más, los propios ingleses mandaron un emisario antes de iniciar las hostilidades para negociar la rendición directa del puerto sin oponer resistencia. Poco sabían los ingleses de la famosa picaresca latina, que los españoles utilizaron para ganar tiempo y prepararse para el inevitable desembarco.

Esto ocurrió unas horas después en una playa cercana al puerto. 1.500 soldados ingleses bajaron y se prepararon en cinco columnas para realizar el ataque directo a la ciudad.

Pero los españoles, sabiendo que eran muchos menos, ya habían preparado al ganado con fuego en las astas y lo lanzaron contra las tropas que lentamente se acercaban. Con la sorpresa, las embestidas y el caos que se generó, los 1500 hombres se dispersaron desordenadamente y huyeron a los barcos como alma que lleva el diablo sin siquiera haber abierto fuego ni una sola vez.

¿Solución elegante? Puede que no, pero sí muy efectiva.

A qué viene todo esto, te estarás preguntado. Ahora es cuando meto la moraleja jaja

El pequeño inversor intenta pelear cara a cara con Wall Street sabiendo que él es más pequeño y que tiene menos recursos. ¿Cómo vas a ganar a un fondo que tiene 20 analistas a jornada completa analizando a los grandes del mercado?

¿Entonces por qué nos empeñamos en comprar empresas billonarias como Tesla, Amazon, Facebook o Apple? 

¿No nos saldría mejor usar nuestro “ganado en llamas” (como hizo el ejército español) a través de las small caps? Piensa que una empresa con una capitalización inferior a 100 millones es intocable para estos gigantes de las finanzas. Incluso una de 500 millones, pero yo prefiero jugar con una ventaja realmente injusta frente a los demás, por eso me gustan las empresas cuanto más pequeñas mejor.

Si quieres aprender a usar tu ventaja injusta en el mercado, te lo enseño todo en el Desafío.

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